viernes, septiembre 28, 2007

Homenaje a Jose Mª Kaydeda

sjceuAunque falleció hace unos meses, nos hemos enterado con imperdonable retraso, el pasado agosto la Feria Nacional de Alfareria estubo dedicada a su memoria. Y es que Jose Mª Kaydeda, además de editor, escritor, historiador, pintor y escultor de prestigio, era el propietario de una de las mejores colecciones de alfarería de Europa. Como homenaje a su vida y obra, queremos rescatar de nuestro archivo este artículo, escrito antes de su muerte, y que nunca llegó a publicarse.

Kaydeda el heterodoxo

Con la inauguración del Museo Jose Mª Kaydeda en la población coruñesa de Oleiros, se culmina la trayectoria de un humanista que, con más frecuencia de la que desearían los defensores del purismo cultural, ha osado incursionarse en el mundo del misterio.

Jose Mª Kaydeda es un conocido, y reconocido, historiador, pintor, escultor y poeta. Su nombre ha sido homenajeado en diferentes y prestigiosos foros culturales. No ha mucho que el Exmo. Ayuntamiento de La Coruña primero, y el de Oleiros después, brindaron sendos homenajes a su trayectoria artística y cultural, llegando este último a galardonarlo como “Hijo Adoptivo de la Ciudad”.

Pero, además de su prestigiosa trayectoria artística, Kaydeda ha sido también un activo investigador y divulgador de los fenómenos paranormales. Como editor ha sido responsable de la edición de muchos libros, entre ellos algunos incunables como el Codice Calixtino. Pero también, su “Kaydeda Ediciones” publicó obras de investigadores tan conocidos como Salvador Freixedo, Joaquin Grau, Manuel Figueroa o Andreas Faber Kaiser. Precisamente, en el caso de Faber Kaiser, Kaydeda fue el artífice de la publicación de su obra cumbre: “El Muñeco Humano”. Los aficionados a la ufología recordarán además los cuadernillos infantiles que, en la década de los ochenta, ilustraban a la juventud española narrando casos clásicos. Pues bien, Kaydeda fue también el responsable de aquellos cuadernillos.

Como escritor debemos resaltar dos obras fundamentales de Jose Mª Kaydeda, su enciclopedia de Magia y ocultismo, y su colosal compilación de Los Evangelios Apócrifos. Obra, esta última, que le valió las iras de la Iglesia y es que, a pesar de que Jose Mª Kaydeda ha estado siempre muy vinculado al mundo religioso, ha sido un crítico feroz de los dogmas católicos. Por ejemplo, mientras monasterios como el de Silos conservan entre sus obras de arte, un espectacular Cristo Doliente, obra de Kaydeda, el Opus Dei condenaba y censuraba en sus librerias, la obra editorial del mismo.

Una mente polifacética


Los roces de Jose Mª Kaydeda con el mundo eclesiastico –en el que, por otro lado, conserva grandes amigos- eran inevitables. Sus conferencias sobre la historia de la Iglesia, impregnadas de una exquisita ironía, resultan un poco irreverentes. Sobretodo viniendo de alquién que posee entre sus tesoros el “auténtico” pico del Espíritu Santo, o una “verdadera” pluma del Arcangel Miguel, o un “genuíno” trozo del prepucio de Cristo... y es que Kaydeda conserva una de las mayores y más exquisitas colecciones de reliquias cristianas de España. Piezas conservadas en ricos relicarios, que convierten el contenido y el continente en auténticas joyas de museo y que, durante la edad média, habrían sido objetos de fanático culto por los cristianos adoradores de reliquias. Sin duda, hace 3 o 4 siglos, Kaydeda sería un hombre muy poderoso en base a los objetos sagrados de su colección particular... no todos los heterodoxos pueden presumir de poseer un trozo de himen de las 11.000 vírgenes... Con su característica ironía Kaydeda se lamenta de no poder disfrutar en su colección con reliquias tan sublimes, como las que pudo ver en el Santa Santorum del Vaticano, donde se conservan dos botes de cristal con un “suspiro de San Jose” y un “estornudo del Espíritu Santo”... Lo que si tiene Kaydeda es un clavo de la cruz de Cristo autentificado y sellado por el Vaticano. Claro que, si juntásemos todos los clavos y trozos de cruz de Cristo que existen en el mundo, podríamos construir una ferretería...

Viajero incansable, el coleccionista de reliquias cristianas ha podido también engrosar su colección con reliquias de otros credos y otros dioses, tras no pocas aventuras a lo largo de todo el mundo. En sudamérica, por ejemplo, pudo internarse en el Amazonas y convivir durante semanas con los indios aucas o con los jíbaros. De hecho en su colección de magia y brujería, una de las más importantes de Europa –sino la mayor- podemos encontrar desde cabezas reducidas de los jíbaros, hasta los muñecos rituales utilizados en los hechizos vudú.

En su museo, recientemente inaugurado en Oleiros, el visitante puede admirar además piezas de arte precolombino que harían palidecer los más fantásticos “astronautas mayas” de von Däniken.

Probablemente fueron sus estudios de las culturas precolombinas, tanto en su dimensión brujeríl como histórica, los que terminaron de abrir la mente de este prestigioso artista e historiador, hacia los temas paranormales. Las experiencias psíquicas de los chamanes, y sus ritos iniciáticos, terminan por ablandar el más férreo escepticismo.

Además, el acceso a esas experiencias religiosas chamánicas, como sus experiencias personales con el vudu haitiano, las sectas asiáticas, y hasta el satanismo, le permitieron abrir su mente a otras formas de entender la religión que van más allá del cristianismo, o incluso, aparentemente en contra. Y es que Jose Mª Kaydeda ha sido de los pocos investigadores que ha tenido la posibilidad de asistir a auténticas misas negras...


La Cultura del misterio


Kaydeda reivindica incansablemente que el misterio forma parte de la cultura, y no es tan sólo el campo marginal al que lo han rebajado pseudo-videntes, pseudo-parapsicólogos o pseudo-contactados.

Su museo de Oleiros es un excelente ejemplo. En él, una inagotable colección de alfarería nos permite viajar por todos los pueblos de España, conociendo a través de su producción artesana aspectos poco conocidos de nuestra cultura; los paridorios, el arte sacro, los muñocos “totemicos”, etc. Una colección que Kaydeda, junto con su compañera ha tardado 5 lustros en reunir. Podemos garantizar por experiencia propia que resulta absolutamente sorprendente e inesperado, comprobar todo lo que se puede aprender de la cultura de un país a traves, tan sólo, de su alfarería.

“Pues con el misterio ocurre lo mismo...” –subraya Kaydeda-. Para el artista-historiador- editor, el mundo paranormal y esotérico encierra importantísimos aspectos culturales, históricos y religiosos, que no se pude obviar.

Según Kaydeda, la pintura o la literatura, la escultura o la poesía, se deben la mayor parte de su inspiración a fenómenos místicos o insólitos. Desde el “Diablo Cojuelo” hasta los akalarres de Goya, el Diablo o la brujería, han sido inspiración de las más importantes letras y pinturas españolas. Y lo mismo ocurre, u ocurrirá, con los ovnis, la parapsicología o el más allá.

Y en esa lucha, la reivindicación cultural del misterio, se haya Jose Mª Kaydeda. El Museo de Oleiros es solo el primer paso de un largo viaje.
EOC

PINCELADAS DE UNA BIOGRAFIA
Nació en Barcelona el 8 de septiembre de 1920, pero su familia se traslada prontamente a Galicia. Estudia en Portugal y, a causa de haber organizado huelgas en el Colegio de los Jesuitas es expulsado del internado.

A los dieciseis años toma parte como voluntario en la guerra civil, donde pasa por un trance que le marcará de por vida, encontrarse frente a frente con un soldado del bando contrario y tener que matar para defender su vida. Según nos confiesa jamás pudo extraer de su memoria los ojos de aquel hombre, de canas y arrugas, que se dejó matar por el adolescente Kaydeda, para no tener que quitarle la vida.

Mas tarde estudia Derecho en la Universidades de Santiago de Compostela y Oviedo.y pronto comienza su vida artística.

En 1941 celebra su primera exposición individual, en el Círculo de Artesanos de Santiago de Compostela. Ese año comienzan también sus colaboraciones en prensa y radio.

En el 51 se inicia como dramaturgo, con la escenografía de “El Sueño de una Noche de Verano” interpretada para el General Franco en el Teatro Colón de La Coruña. Y por esas misma fechas inicia su trayectoria como poeta y conferenciante, lo que le ha hecho merecedor, junto con el arte, de numerosos premios: Premio Arte Sacro, Premio Salón del Toro, etc.

Hacia los años setenta comienza a convertirse en un contertulio habitual en programas y congresos de contenido paranormal, compartiendo micrófonos, cámara o atril con los investigadores de misterio más relevantes.

Posteriormente funda “Ediciones Kaydeda”, una editorial especializada en obras transgresoras y heterodoxas, y más tarde cede su colección privada al Ayuntamiento de Oleiros (La Coruña), que recientemente acogió parte de dicha colección en el museo Os Oleiros-Jose Mª Kaydeda.


YO ASISTI A UNA MISA NEGRA
Jose Mª Kaydeda ha sido uno de los pocos investigadores que ha tenido la oportunidad de asistir a auténticas misas negras. Así lo recuerda, en exclusiva, para nuestros lectores:

“Ocurrió en Francia, en Paris. Yo había comentado en círculos culturales mi interés por conocer directamente el mundo del satanismo. Como escritor e historiador me interesaban todas las facetas de la religión, incluido el mundo de Satán. Y un día fui invitado a cenar en casa de una Sra. muy importante en la vida social parisina. En la cena compartí mesa con un notario, unos médicos, un cura... en fin, gente de una situación social acomodada...

“Cuando terminamos la cena esa Sra. me interrogó sobre mi deseo de asistir a una misa negra. Deseo que yo reafirmé, así que me invitó a seguirla si me atrevía, de verdad, a asistir a un rito satánico “auténtico”. Me metió en su coche y me llevó a un lugar, cerca de los Campos Elíseos, donde me hizo apearme y esperar. Ya era de noche, y no me hizo mucha gracia quedarme allí sólo.

“Al rato se acercó un hombre y me dijo que le siguiese. Me llevó hasta un chalet muy lujoso rodeado de jardines. Le seguí hasta una especie de probador donde tuve que desnudarme completamente y ponerme una especie de blusón negro hasta los pies. Luego me llevó hasta un gran salón donde había otras personas vestidas con blusones iguales. Las paredes estaban cubiertas por unos cortinones negros, del techo al suelo. El suelo era también negro, y en centro del salón había una especie de altar bajo un gran crucifijo invertido, con un ara y muchos cirios, también de color negro.

“ Esperé un rato allí, en silencio, hasta que de pronto vi entrar a la Sra. que me había llevado a mi. Iba completamente desnuda. Detrás de ella iba un hombre, también desnudo, pero con una casulla católica... ¡era el sacerdote católico con el que había estado cenando antes!

“La mujer se tendió en el altar y empezó el ritual de invocación. El cura utilizó una ostia negra que consagró en el sexo de la Sra. y consumió. Hubo reparto de pequeñas ostias negras para quien quisiera “comulgar”. Al terminar la invocación se quita la casulla y copula con la mujer delante de todos nosotros. Eso debió ser una especie de señal porque a partir de ese momento varios de los presentes se pusieron a practicar el sexo indiscriminadamente. Al final el cura se puso a proclamar entre grandes blasfemias su invocación a Satán. Fue muy espectacular, porque de pronto sentí un aire muy frío y vi como hasta los cortinones se movían como si hubiese entrado un viento gélido en el salón. No se si tenían ventiladores ocultos, o si me vi influenciado psicológicamente por aquel ambiente tan impresionante. Pero lo cierto es que aquel viento era real porque hasta se apagaron las velas...

“No se si Satán realmente se manifestó en aquella misa negra. Pero si se que al día siguiente el cura, que esa noche fornicó con la Sra. en aquel altar satánico, probablemente estaría escuchando en confesión a los feligreses de su parroquia... y eso si que es diabólico...”
EOC